Castillo de Pfaueninsel
Si es la primera vez que estás en Berlín y tienes algún día libre en el que te apetezca escapar un poco de la ciudad, yo te recomendaría ir a Potsdam. Está relativamente cerca y merece la pena. Pero si tienes poco tiempo y quieres ver algo rápido, o bien ya has estado más veces en Berlín y quieres visitar cosas nuevas, estas tres escapadas son una buena opción.
Las dos primeras alternativas se pueden hacer juntas el mismo día ya que están a pocas paradas de tren de distancia. Puedes ir a una por la mañana y a la otra por la tarde.
SPANDAU
A tan sólo 30 minutos de Mitte (centro de Berlín) se encuentra este viejo barrio que se fundó antes que la propia Berlín.
Tras la II Guerra Mundial pasó a formar parte del sector británico y en ella se instaló la conocida Prisión de Spandau, en la que fueron encerrados los condenados tras los Procesos de Nuremberg, incluidos muchos jerarcas del régimen nazi. La cárcel cerró sus puertas en 1987 tras la muerte de su último prisionero, Rudolf Hess.
Actualmente Spandau es el quinto distrito administrativo de Berlín y una agradable opción para darse una vueltecilla.
Lo primero que vamos a hacer es ir a Gotisches Haus por varias razones; Porque se trata de una de las casas más antiguas de Berlín (Edad Media), porque acoge una exposición permanente sobre la historia de Spandau y porque en ella se ubica la Oficina de Turismo.
Luego dirigiremos nuestros pasos hacia Reformationsplatz, donde visitaremos la Nikolaikirche (Iglesia de San Nicolás, 1€), un templo luterano del s.XV de estilo gótico.
En su interior destaca una pila bautismal de bronce de 1398, un púlpito barroco de 1714 y un altar renacentista con un panel ilustrando la Última Cena.
En 1539 se ofició aquí la primera misa protestante de Brandenburgo.
Al salir nos toparemos con una estatua de Joaquín Federico II realizada en bronce y diseñada por Erdmann Encke en 1889.
Aunque nos encontramos en pleno casco antiguo, no estamos en la parte más vieja de Spandau. Separado de éste por la Strasse am Juliusturm se sitúa Kolk, un barrio de ambiente medieval, calles estrechas y restos de muralla.
Aquí se halla la Iglesia de St. Marien am Behnitz (entrada gratuita), el segundo templo católico más antiguo de Berlín (1848).
Ha sido recientemente restaurada y en su interior se celebran conciertos.
Pero la joya de Spandau está a las afueras de la localidad (se puede ir perfectamente andando). Se trata de la Ciudadela (4.5€), una de las fortalezas renacentistas más importantes y mejor conservadas del mundo.
Su ubicación es excepcional, se encuentra en una pequeña isla sobre el río Havel rodeada de frondosa vegetación.
Fue construida en el s.XVI, aunque tras la ocupación de las tropas napoleónicas (1813), fue reconstruida en estilo clásico.
Para tener una buena panorámica de Spandau y los ríos Havel y Spree podemos subir a la Torre de Julio (30 m), levantada como torre defensiva entre 1874 y 1919.
En el interior de la fortaleza podemos visitar también el Museo Histórico de Spandau.
Es escenario de diferentes eventos; Fiestas, conciertos, bodas...
En sus catacumbas vive una colonia de murciélagos; Hay una sala en la que se explica la vida de estos pequeños mamíferos alados.
ESTADIO OLÍMPICO
Se construyó para albergar las polémicas olimpiadas de 1936. Y digo polémicas por lo que ya sabéis; Hitler, nazis, racismo, antisemitismo...
No era el lugar idóneo para compartir ese espíritu olímpico de igualdad.
Pero para los que se pregunten por qué fue elegida la Alemania Nazi para albergar tal evento ahí va la respuesta:
El Comité Olímpico Internacional eligió esta ciudad como sede antes de la subida al poder de Hitler (Se decidió en 1931 y el partido nazi ganó las elecciones en 1933).
Incluso fue un detalle por parte del Comité ya que los juegos olímpicos de 1916 que se iban a celebrar en Berlín fueron cancelados por la Primera gran Guerra.
En fin, ante la elección de la ciudad no hubo una especial polémica.
Pero luego llegaron los nazis y claro, su particular forma de ver la vida chocaba mucho con lo que unos juegos olímpicos significan.
Hubo propuestas de boicot y la posibilidad de crear unos juegos alternativos en Barcelona, la otra ciudad candidata. Estados Unidos, Reino Unido, Francia, Suecia, Checoslovaquia, Holanda y España harían los juegos por su lado, pero comenzó la guerra en España y la cosa se tuvo que anular. Al final todos esos países a excepción de España fueron a los juegos de Berlín.
Hitler sabía que era el lugar y el momento perfectos para dar a conocer al mundo la supremacía alemana. Se cuidaron todos los detalles, la organización fue perfecta y se eliminó la propaganda antisemita. Había que causar una buena impresión y que todo el mundo viera la parte positiva del régimen (la cara negativa fue ocultada).
Para mayor satisfacción del Führer y para afianzar su idea de la raza superior, Alemania fue la que más medallas ganó.
A pesar de ello, los atletas de raza negra ganaron gran parte de las competiciones.
Uno de los mejores fue Jesse Owens que conquistó 4 medallas de oro.
Se dice que Hitler no quiso saludarle pero hay otras versiones que desmienten ese hecho.
La historia de Owens, así como la de otros atletas afroamericanos, tiene mucha miga.
Los atletas de color eran discriminados en las olimpiadas, algunos ni siquiera participaban en la ceremonia de apertura.
Es paradógico que en la alemania nazi (es cierto que era porque querían dar una buena imagen), los atletas negros se sintieron integrados.
Jesse Owens cuenta en su autobiografía como se le permitió hospedarse en los mismos hoteles que a los blancos, como muchos berlineses le pedían autógrafos y como Hitler sí le saludó.
Toda una ironía para un deportista tan grande que vio como al volver a su país su presidente, Franklin Delano Roosevelt, rehusó recibirle, donde no tenía libertad para vivir donde él quisiera y donde se le prohibía sentarse en la parte delantera de un autobús (parece increíble)
Existen otras muchas historias relacionadas con estos juegos pero no quiero enrollarme más, sólo quería poneros un poco en situación de donde nos encontramos.
Más recientemente, el estadio olímpico de Berlín, fue uno de los campos donde se jugó el mundial de fútbol 2006 y en el que se disputó la final entre Italia y Francia.
Actualmente es el hogar del Hertha de Berlín y acoge también algún que otro macroconcierto.
Si entras sin más, lo único que verás será un estadio de fútbol con zona olímpica, poco más. Un consejo que considero imprescindible es ir con guía o adquirir una audioguía (2.5€). Gracias a ella te enterarás de toda la historia y de los puntos más emblemáticos.
Al otro lado del estadio, tras el Campo de Mayo, se eleva con poderío la Torre del Reloj (77 m). La visita es aparte de la del estadio y se entra por otro sitio (al menos cuando fui yo).
Desde lo más alto hay una excelente panorámica.
En el interior hay una exposición sobre dicha costrucción y sobre los juegos olímpicos. También hay una proyección muy interesante sobre el tema (lo malo es que está en alemán con subtítulos en inglés)
Para más información sobre este lugar os dejo este enlace que además está en español:
http://www.glockenturm.de/es/index.html
PFAUENINSEL (Isla de los pavos reales)
No conocía mucho sobre este lugar y lo poco que había leído me gustaba. En teoría se trata de un lugar muy romántico al que los berlineses les encanta venir a pasear.
Un jardín de cuento que además es reserva natural desde 1990 y Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
Es la segunda isla más grande de Berlín con 1.5 km de longitud y está situada sobre un lago formado por las aguas del río Havel.
Con todo esto como para no ir; En mi cabeza me imaginaba un vergel con flores, estatuas, fuentes monumentales, arbustos decorados con formas... pero sinceramente no se cumplieron mis expectativas (también es culpa mia por esperarme una cosa que no era).
Yo lo definiría como un pedazo de tierra y vegetación con algunos monumentos desperdigados por ahí (algunos no muy bien cuidados).
No quiero daros una imagen equivocada del lugar, ni es un oasis precioso ni una ponzoña horrible, cada uno que vaya y saque su propia conclusión.
La ubicación sobre el lago y los senderos rodeados de naturaleza hacen que sea un lugar ideal para pasear y desconectar un poco de la ciudad.
Por el camino es más que probable que te cruces con el animal que da nombre a la isla, el pavo real, hay bastantes y van a su aire.
Os cuento un poquito su historia:
En 1793 el rey Federico Guillermo de Prusia adquirió esta isla para crear en ella un zoológico de animales exóticos (del zoo sólo quedan una cuantas aves enjauladas)
Al rey le gustaba la princesa Guillermina von Lichtenau y construyó para ella un pequeño palacio con forma de castillo en ruinas.
También creó un conjunto de edificios dispersos por la isla para dar mayor encanto al lugar (lo que no sé es si lo consiguió).
Como dije al principio, éste es un lugar muy romántico para los berlineses, de hecho, el escritor alemán Heinrich von Kleist, uno de los principales dramaturgos del romanticismo alemán, se suicidó en esta isla junto con su mujer enferma de cáncer en 1811.
No pudo soportar el estruendoso fracaso de su última obra teatral, así que vino hasta aquí, le pegó un tiro a su chica y luego se lo pegó él (ese era un tío que sabía encajar bien las críticas).
Reportaje de Septiembre de 2010
INFORMACIÓN ÚTIL
INFO ÚTIL:
Información Turística Spandau
Breite Strasse, 32.
Tel: (030) 333 93 88
Horario: Abre de lunes a sábado de 10 a 18 horas.
Spandau-Ciudadella
Ciudadela de Spandau (entrada 4.5€)
Puedes adquirir una audioguía por 2€ (alemán, inglés, español e italiano)
También hay visitas guiadas sin reserva los sábados, domingos y festivos. De Marzo a Octubre a las 11, a las 13 y a las 15 horas y en Noviembre a las 11 y a las 13 horas.
Horarios: De lunes a domingo de 10 a 17 horas.
Zona Olímpica
Estadio Olímpico (4€)
Tel: +49 (0) 30/25 00 23 22
Horarios Estadio Olímpico:
Del 20 Marzo al 31 de Mayo y del 16 de Septiembre al 31 de Octubre abre de 9 a 19 horas.
Del 1 de Junio al 15 de Septiembre abre de 9 a 20 horas.
Del 1 de Noviembre al 19 de Marzo abre de 9 a 16 horas.
Torre del Reloj (3.5€)
Tel: 030 / 305 81 23
Pfaueninsel
Ferry que te lleva a la isla 2€ (Averiguralo)
Palacio (3€)
Horarios: De Noviembre a Febrero de 10 a 16 h. De Mayo a Agosto de 8 a 21 h. y Marzo, Abril, Septiembre y Octubre de 9 a 18 h.
CÓMO LLEGAR:
Spandau-Ciudadella
U-Bahn U7 estación "Zitadelle" (Esta parada es mejor para ir diréctamente a la ciudadella)
S-Bahn S-9 y S-75 estación "Spandau"
Autobús X33
Zona Olímpica
U-Bahn U2 (Olympiastation)
S-Bahn S-3 o el S-75 (Olympiastation y Pichelsberg para la torre del reloj)
Autobuses M/49, 218 y 104.
Pfaueninsel
Lo mejor es ir en tren hasta la estación de Wannsee y enfrente de la misma tomar el autobús 218.