Valle de Fornela

"El lugar favorito del silencio"

El Valle de Fornela es uno de esos tesoros ocultos que poca gente conoce. Estoy seguro de que si no tuviera una amiga allí no lo habría conocido y me habría perdido un sitio tranquilo, con buena gente y paisajes increíbles.

Este lugar pertenece a la Comarca del Bierzo que se encuentra a su vez dentro de la Reserva Nacional de los Ancares Leoneses.
Fornela es un valle de montaña de origen glaciar formado por el curso alto del río Cúa. Basta con remontar el curso del río para introducirnos de lleno en estos preciosos parajes.
El municipio está formado por las poblaciondes de Fresnedelo, Faro, Cariseda, Peranzanes, Trascastro, Chano y Guímara. En Peranzanes está el ayuntamiento de todos ellos.
En estos pequeños pueblos de pizarra negra y estrechas calles destacan sus iglesias, alguna de interés cultural; Entre ellas mencionaremos el Santauario de Nuestra Señora de Trascastro (Trascastro), con un retablo barroco en su interior, la Iglesia Parroquial de Santa Eufemia (Peranzanes) y la Iglesia Parroquial de San Bartolomé (Guímara).
También cabe destacar a sus habitantes, gente sencilla, amable y trabajadora que se ha hecho fuerte con el tiempo, pues esta zona ha sufrido el abandono durante muchos años. Por suerte, gracias al agroturismo y a las ayudas de los organismos públicos se ha empezado a recuperar, aún así, el aislamiento y la incomunicación por las nevadas de invierno son bastante frecuentes.
Todo ello ha hecho que exista una cultura típica del valle y de los Ancares en general, desde la arquitectura popular, representada por las *pallozas (todavía se pueden ver algunas)  hasta las creencias, el folclore y la lengua (una mezcla de gallego, asturiano y castellano)
En Trascastro hay una jerga relacionada con el comercio entre la gente del valle conocida como "El Burón".

El valle ha sido habitado desde la prehistoria; Entre los pueblos de Chano y Guímara se halla un importante yacimiento arqueológico perromano, el Castro de Chano, datado por los expertos entre finales del s.I a.C. y principios del s.I d.C.
En la ladera de la montaña, junto a la carretera, hay tres réplicas de las viviendas originales y un centro de interpretación donde te explicarán la historia y el modo de vida de aquellas gentes. El castro original está muy cerquita, a 5-10 minutos subiendo por un camino con pasarelas de madera. Merece la pena, pues a pesar de lo poco que queda se trata de uno de los castros más importantes del norte de la península.

El senderismo es una excelente opción para conocer en profundidad el valle. De todos los pueblos salen rutas muy recomendables.
Camina entre robles, castaños, hayas o abedules y crúzate con un corzo, una perdiz, un rebeco o un conejo, bueno, también hay lobos y jabalíes pero mejor no cruzarse con ellos por si acaso.  Si tienes muchísima suerte podrás ver al rey de la fauna de los ancares, el urogallo.
El cielo pertenece al águila real y al azor y en el medio acuático hay truchas y alguna inquieta nutria.
Yo hice la ruta del cuadro que parte de Guímara. Se puede hacer andando, en bici, en moto o incluso en coche, pero mejor que sea un 4x4 o un coche al que no tengas mucho aprecio.
El camino, que no ofrece dificultades, nos deleita con aire puro, vistas espectaculares y numerosos saltos de agua que se precipitan por la montaña buscando el cauce del río Cúa.
A mitad de camino (más o menos) se encuentra el Txeiro, una coqueta cascada que forma una poza en la que los jóvenes se bañan en verano. (No está a la vista, hay que conocer donde está).
Una vez alcanzamos el final de la ruta podemos continuar hacia arriba hasta la pesca (merece la pena). Aquí hay una cabaña en la que podemos hacer noche gratuitamente.

*Palloza - Son construcciones arcaicas de forma circular hechas de piedra con techos de madera y paja. Su origen es incierto, unos dicen que son celtas y otros que son del medievo.
En el mismo recinto se situaba la vivienda, el establo y el pajar; Eran frescas en verano y calientes en invierno.

Reportaje de Diciembre de 2008

Uno de los placeres de esta zona es la comida. Buenos alimentos bien cocinados. Las especialidades del valle son las patatas con bacalao, el botillo y el caldo fornelo.
Tienes que pedirlos por encargo en algunos restaurantes.

Este es un consejo a tener en cuenta en cualquier momento y en cualquier lugar pero aquí hago hincapié; "No corras al volante" . A ver si hacemos caso de una vez.
En una ocasión nos salió un corzo, la suerte fue que saltó por detrás del coche ya que si llega a ser por delante no quiero ni pensarlo. Además la carretera no es muy buena y tiene muchas curvas así que precaución (la última vez que fui la estaban arreglando, menos mal).

Invierno es una estación preciosa para venir (los paisajes son increíbles) pero complicada, ya que las nevadas dejan incomunicados a muchos pueblos.
Aunque vengas en verano no te olvides de traer alguna chaqueta, puede refrescar durante la noche.